De vez en cuando me doy una vueltecilla por El Blog Salmón, un blog centrado en el tema de la economía. En este blog participan diversos expertos en economía, y cobran por ello (la propietaria del blog es una empresa, no los autores). Como podéis imaginar, los autores de este blog no son precisamente progres trasnochados, que diría el Gran Wyoming.
Cuando se supone que eres un experto en economía, y te pagan por escribir en un blog, es todo un detalle intentar que no se te vea el plumero. El problema viene cuando no sólo se te ve el plumero, sino cuando demuestras que lo de «experto» también es bastante discutible.
Estoy refiriéndome a la entrada ¿Porqué no nos vamos? que se publicó el pasado día 13, a raíz de la pelotera diplomática que se ha formado gracias a Chávez y a nuestro desocupado monarca («¿porqué no te callas?»).
Que porqué no nos vamos, dice... tsk, tsk. Lo que hay que oír.
Vaya por delante mi máximo respeto a IC, autor del post y seguramente gran experto en economía, ya que mis conocimientos sobre ese tema son bastante rudimentarios, aunque me parece que para el viaje no me van a hacer falta tantas alforjas.
Señor IC, las multinacionales españolas no se van de América latina porque, dicho simple y llanamente: se están forrando. Las multinacionales no son hermanitas de la caridad: si no les saliera a cuenta, haría mucho tiempo que se hubieran largado.
Precisamente esas condiciones que tanto critica el señor IC: inestabilidad gubernamental, inseguridad jurídica, etc., son las que históricamente han aprovechado las multinacionales europeas y norteamericanas para llevar a cabo maniobras que seguramente en Europa o en EEUU no les hubieran consentido. Y si comparamos las condiciones laborales de sus trabajadores, con las de sus homónimos europeos o estadounidenses, mejor corremos un tupido velo, ¿no?
Duerma usted tranquilo, señor IC, que los directivos de Repsol YPF, Telefónica y demás no van a pasar «hambre frío y calamidad». A lo mejor se forran un poquito menos, pero seguramente ni eso.
tienes razón, lillo, no nos vamos porque nos forramos (pensamiento fácilmente atribuible a cualquier directivo de esas "pobres" empresas).
ResponderEliminarMuy buen post!