Esta tarde he asistido a la charla que el abogado Carlos Sánchez Almeida, un peso pesado en la defensa de los ciberderechos, ha dado en la EUPMT.
No estoy de acuerdo con todo lo que dice este hombre (aunque sí lo estoy con sus objetivos). Ahí donde se le ve, me ha parecido un tio bastante radical (para ser abogado, se entiende).
No duda en proclamar que el software propietario debería estar prohibido (por ley) en la administración, y no le faltan argumentos: el artículo 9.3 de la constitución garantiza la publicidad de las normas. O, lo que es lo mismo: las leyes y reglamentos jurídicos deben ser universalmente accesibles; por ejemplo, uno debería poder comprobar si los programas informáticos que calculan nuestros impuestos hacen lo que tienen que hacer, y no otras cosas extra
. Para eso es imprescindible poder acceder al código fuente y, que la administración pudiese modificarlo en caso de que se detectaran errores. Es decir, software libre o, como mínimo, open source.
Un punto en el que discrepo es en que Sánchez Almeida cree que el principal motivo para utilizar software libre es jurídico. A mí me parecen más importantes las motivaciones éticas y sociales, pero no está de más saber que la ley está de nuestro lado (al menos ese artículo de la constitución).
El resto de la charla ha tenido un tono bastante reivindicativo, centrándose sobre todo en el artículo 97, apartado 4 de la Ley de Propiedad Intelectual, y en ejemplos de cláusulas ciertamente aberrantes que los informáticos nos comemos con patatas cuando firmamos un contrato para trabajar por cuenta ajena.
Os recomiendo que echéis un vistazo al guión que ha utilizado para la charla de hoy. Los organizadores han dicho que colgarían el video de la charla en internet. Si me entero de cuándo lo hacen, ya pondré el enlace.
Si os interesa el tema, aquí tenéis las comparecencias de Sánchez Almeida en el Senado: sobre la LSSI, y ante la Comisión para la sociedad de la información.